martes, 12 de abril de 2011

Odiando a gusto...

• Odio madrugar en general. Y odio esa primera media hora de la mañana en la que vas zombie de un lado para otro hasta que te espabilas un poco.
• No me gusta que nadie duerma en mi cama. Mi cama es mía y solo duermo yo en ella.
• Odio la gente que erupta en público.
• Odio ir a la cocina y encontrarme migas en la mesa o la vitro llena de salpicaduras de aceite. Me pone de los nervios.
• Odio que me cojan cosas sin permiso.
• Odio a todas esas marujas que hablan a voces en los autobuses de temas que no importan a absolutamente nadie y solo se les oye a ellas.
• Odio a los chavales que llevan los cascos del IPod a tope y tienes que escuchar esa mierda de música hasta la otra punta del bus.
• Por no decir lo que aborrezco a los que ni siquiera se ponen cascos.
• Odio la rutina. Odio repetir y hacer lo mismo día a día y semana a semana.
• Odio el desorden.
• Odio a toda esa gente que se cree más de lo que es o cree que tiene más de lo que aparenta.
• Odio las mentiras a medias, casi tanto o igual que las mentiras enteras.
• Odio entrar a una tienda y que venga la típica aburrida de la vida a preguntarte “¿te puedo ayudar en algo?”
• Odio pensar que puedo morir de vieja durante los anuncios de Antena3.
• Odio no poder pasar una tarde en casa sin picar alguna chorrada.
• Odio el manicomio al que voy de Lunes a Viernes todas las mañanas de 8:15 a 2:15. Algunos le llaman “instituto”.
• Odio los kebab.
• Odio a toda la gente de Sálvame. Premio a lo más patético en TV hoy en día.
• Odio que se me caiga tanto el pelo.
• Me casi-odio a mí misma de arriba abajo físicamente.
• Odio aprender algo en inglés olvidarlo a los diez minutos.
• Odio no sentirme valorada.
• Odio por encima de todos los dolores, el de tripa de la menstruación.
• Odio cuando me entra la vaguería. Siento que desperdicio mi vida.
• Odio no querer dejar de fumar.
• Odio la lechuga, los puerros y la alcachofa.
• Odio las matemáticas y cualquier cosa que tenga números y haya que estudiarla.
• Odio a casi todos los profesores.
• Odio que me lleven la contraria cuando sé con certeza que tengo razón.
• Odio la prepotencia.
• Odio pelar quesitos.
• Odio los pitiditos del móvil cuando se queda sin batería.
• Odio a Justin Bieber.
• Odio pensar que mis abuelos son mayores y cualquier día me puedo quedar sin ellos.
• Odio sentirme sola y odio estar en medio de un overbooking de gente.
• Odio mi mal humor post-siesta.

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